Londres - El exceso de peso puede ser perjudicial a la hora de tener relaciones sexuales, especialmente si se trata de una mujer, según los científicos.
En un nuevo estudio, los investigadores europeos descubrieron que las obesas tienen más problemas para encontrar una pareja sexual que las de peso normal, aunque la situación no es aplicable a los hombres gordos, y tienen cuatro veces más posibilidades de quedar embarazadas involuntariamente. Los gordos tuvieron igualmente mayores posibilidades de sufrir de impotencia.
Los especialistas entrevistaron a casi 10,000 mujeres y hombres franceses entre los 18 y los 69 años sobre sus experiencias sexuales y analizaron los resultados según su Indice de Masa Corporal.
Las mujeres obesas tuvieron un 30% menos de probabilidades que las de peso normal de tener una pareja sexual en el último año. En comparación, apenas hubo diferencia entre los obesos y los hombre de peso normal en cuando al hallazgo de una pareja sexual.
Los resultados fueron publicados el miércoles en la edición de internet de la revista médica BMJ. El estudio fue costeado por varios organismos gubernamentales franceses.
Las personas con un IMC de 18-24 son consideradas con un peso sano. Las de un IMC de 25 o más son consideradas gordas y las de un IMC de 30 o más son consideradas obesas.
Los estudios anteriores descubrieron tendencias similares, pero los investigadores se sorprendieron por la discrepancia que encontraron entre los géneros sobre cómo el exceso de peso afecta la vida sexual de las personas.
"Muchas mujeres son más tolerantes de sus esposos rellenitos que los hombres de mujeres entradas en kilos", opinó el profesor Kaye Wellings, especialista en salud sexual y reproductiva de la Facultad de Higiene y Medicina Tópica de Londres y uno de los autores del estudio de BMJ.
Los especialistas sostienen que los problemas encarados por las personas obesas se deben probablemente a una combinación de problemas físicos ligados a la obesidad y de otra índole, como la baja autoestima o prejuicios sociales.
Las personas obesas tienen mayores riesgos de sufrir diabetes, depresión e incontinencia urinaria, todo lo cual puede entorpecer las relaciones sexuales. Si las personas sufren de gordura extrema, pueden sufrir problemas óseos o musculares que dificultan la práctica y el disfrute del coito.
Los investigadores descubrieron que las mujeres obesas son menos propensas a solicitar medidas para el control de la natalidad y por ello son cuatro veces más propensas a quedar embarazadas.
En un nuevo estudio, los investigadores europeos descubrieron que las obesas tienen más problemas para encontrar una pareja sexual que las de peso normal, aunque la situación no es aplicable a los hombres gordos, y tienen cuatro veces más posibilidades de quedar embarazadas involuntariamente. Los gordos tuvieron igualmente mayores posibilidades de sufrir de impotencia.
Los especialistas entrevistaron a casi 10,000 mujeres y hombres franceses entre los 18 y los 69 años sobre sus experiencias sexuales y analizaron los resultados según su Indice de Masa Corporal.
Las mujeres obesas tuvieron un 30% menos de probabilidades que las de peso normal de tener una pareja sexual en el último año. En comparación, apenas hubo diferencia entre los obesos y los hombre de peso normal en cuando al hallazgo de una pareja sexual.
Los resultados fueron publicados el miércoles en la edición de internet de la revista médica BMJ. El estudio fue costeado por varios organismos gubernamentales franceses.
Las personas con un IMC de 18-24 son consideradas con un peso sano. Las de un IMC de 25 o más son consideradas gordas y las de un IMC de 30 o más son consideradas obesas.
Los estudios anteriores descubrieron tendencias similares, pero los investigadores se sorprendieron por la discrepancia que encontraron entre los géneros sobre cómo el exceso de peso afecta la vida sexual de las personas.
"Muchas mujeres son más tolerantes de sus esposos rellenitos que los hombres de mujeres entradas en kilos", opinó el profesor Kaye Wellings, especialista en salud sexual y reproductiva de la Facultad de Higiene y Medicina Tópica de Londres y uno de los autores del estudio de BMJ.
Los especialistas sostienen que los problemas encarados por las personas obesas se deben probablemente a una combinación de problemas físicos ligados a la obesidad y de otra índole, como la baja autoestima o prejuicios sociales.
Las personas obesas tienen mayores riesgos de sufrir diabetes, depresión e incontinencia urinaria, todo lo cual puede entorpecer las relaciones sexuales. Si las personas sufren de gordura extrema, pueden sufrir problemas óseos o musculares que dificultan la práctica y el disfrute del coito.
Los investigadores descubrieron que las mujeres obesas son menos propensas a solicitar medidas para el control de la natalidad y por ello son cuatro veces más propensas a quedar embarazadas.