De acuerdo al médico que la atendió, el incidente ocurrido en China se habría originado por la falta de músculo que tiene la joven en su cuerpo.
Consumir comida picante le ocasionó un mal momento a Huang, una mujer de Shangai, China, quien, luego de comer un plato altamente condimentado, sufrió de una fuerte tos que la dejó con cuatro costillas rotas.
De acuerdo al medio South China Morning Post, Huang escuchó en el momento que tosió una crujido que venía de su tórax; sin embargo, dejó pasar por alto esa alarma y no se percató de la fractura hasta algunas horas después, cuando empezó a tener un fuerte dolor en el pecho, dificultad para hablar y respirar.
Ante estos síntomas, la mujer acudió a un centro médico donde se le realizó una tomografía, la cual mostró que los dolores se debían a que tenía cuatro de sus costillas rotas. Con este diagnóstico tuvo que ser vendada y deberá de permanecer en reposo cerca de un mes.
Asimismo, el médico señaló que este incidente se habría originado debido al bajo peso que la joven mujer presentaba. “Sus costillas se pueden ver claramente debajo de su piel. No hay músculo para sostener el hueso, por lo que es fácil que sus costillas se fracturen al toser”, indicó el profesional.
Advertida de esta situación, que podría volver a repetirse, Huang se comprometió a que, una vez que se encuentre totalmente recuperada, cambiará su dieta e iniciará una rutina de ejercicio físico con peso, para así aumentar su masa muscular.
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Consumir comida picante le ocasionó un mal momento a Huang, una mujer de Shangai, China, quien, luego de comer un plato altamente condimentado, sufrió de una fuerte tos que la dejó con cuatro costillas rotas.
De acuerdo al medio South China Morning Post, Huang escuchó en el momento que tosió una crujido que venía de su tórax; sin embargo, dejó pasar por alto esa alarma y no se percató de la fractura hasta algunas horas después, cuando empezó a tener un fuerte dolor en el pecho, dificultad para hablar y respirar.
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Asimismo, el médico señaló que este incidente se habría originado debido al bajo peso que la joven mujer presentaba. “Sus costillas se pueden ver claramente debajo de su piel. No hay músculo para sostener el hueso, por lo que es fácil que sus costillas se fracturen al toser”, indicó el profesional.
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