La menor de 16 años fue encontrada por su madre, quien hizo un llamado de atención sobre la falta de información acerca del riesgo de estos productos.
Una adolescente de 16 años de edad falleció de manera trágica por un aparente ataque al corazón, luego de inhalar un desodorante en spray. La menor, en su intento por calmar un ataque de ansiedad, aspiró el aerosol y le produjo consecuencias nocivas.
El hecho sucedió en Nueva Gales del Sur, Australia. Anne, madre de la menor, fue quien encontró el cuerpo de su hija boca abajo. Junto a la fallecida estaba un desodorante y un paño de cocina.
“Me despierto, pienso en ella; me acuesto y pienso en ella (...) Cada día es una pesadilla”, habló Anne para Sydney Morning Herald, un medio de su localidad.
El mismo informativo acotó que la joven venía luchando contra la ansiedad tras las severas medidas que el Gobierno australiano tomó por la pandemia por la COVID-19.
“B. era una niña hermosa, con un corazón de oro, a quien extrañamos mucho, y estaría absolutamente devastada al saber el impacto negativo que ha tenido en tantas personas con su muerte”, relata la madre.
En esa misma línea, la madre de familia hizo un llamado de atención a las autoridades de Australia, exigió una mejora en la educación de los productos de alto riesgo. Además, pidió la mejora en la salud mental de los adolescentes.
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Una adolescente de 16 años de edad falleció de manera trágica por un aparente ataque al corazón, luego de inhalar un desodorante en spray. La menor, en su intento por calmar un ataque de ansiedad, aspiró el aerosol y le produjo consecuencias nocivas.
El hecho sucedió en Nueva Gales del Sur, Australia. Anne, madre de la menor, fue quien encontró el cuerpo de su hija boca abajo. Junto a la fallecida estaba un desodorante y un paño de cocina.
“Me despierto, pienso en ella; me acuesto y pienso en ella (...) Cada día es una pesadilla”, habló Anne para Sydney Morning Herald, un medio de su localidad.
El mismo informativo acotó que la joven venía luchando contra la ansiedad tras las severas medidas que el Gobierno australiano tomó por la pandemia por la COVID-19.
“B. era una niña hermosa, con un corazón de oro, a quien extrañamos mucho, y estaría absolutamente devastada al saber el impacto negativo que ha tenido en tantas personas con su muerte”, relata la madre.
En esa misma línea, la madre de familia hizo un llamado de atención a las autoridades de Australia, exigió una mejora en la educación de los productos de alto riesgo. Además, pidió la mejora en la salud mental de los adolescentes.
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