Un hombre no quería pasar otra Navidad solo, por lo que se dispuso a buscar pareja a través de las redes sociales. Eliezer Zavala Reyes no tardó mucho tiempo en conectar con una chica que le gustó mucho, solo había un inconveniente, él tenía 26 años y ella 14.
Bajo las leyes estatales, la relación entre una persona adulta y una menor de edad es prohibida, pero a Zavala Reyes esto no le importó. En repetidas ocasiones la adolescente le advirtió a Zavala que la enorme diferencia de edad podría crearle problemas, a lo que Eliezer solo siguió sonsacándola para tener un encuentro, incluso afirmó estar dispuesto a formar un hogar con ella.
La menor aceptó el trato y se pusieron de acuerdo para verse un día antes de Navidad en un motel del condado de Cobb, donde pasarían el día juntos, para después de ese encuentro de 24 horas, decidir su futuro, en un arreglo que parecía dejar satisfechos a ambos.
Sin embargo Eliezer, no tenía idea de que la chica con quien había pactado la jornada de placer, era en realidad un oficial de la ley, uno de los muchos detectives que diariamente se hacen pasar por niños y jóvenes en línea para atrapar a pedófilos que buscan víctimas en Internet, con el fin de tener relaciones sexuales.
El arresto de Zavala Reyes se dio cuando se paró frente al mostrador del motel Comfort Inn en la ciudad de Smyrna, justo cuando se disponía a registrarse en la habitación para esperar a que arribara su futura pareja.
En ese momento los agentes encubiertos del Departamento de Policía de Cobb lo detuvieron bajo el cargo de comunicación indecente en línea con una niña de 14 años.
Los oficiales tenían en su poder los mensajes de texto enviados por Eliezer previamente, en los que textualmente informaba a la menor de edad lo que pretendía hacer una vez que estuvieran a solas, lo que era prueba suficiente de sus intenciones para tener relaciones íntimas con una menor.
Eliezer Zavala Reyes no podrá argumentar que solo quería una amistad con la menor, además cuando fue detenido, el acusado le dio una identidad falsa a la policía, por lo que no fue sino hasta que se encontraba recluido y fueron tomados sus datos biométricos, que se descubrió su verdadero nombre.
La razón de su mentira era que sabía que lo estaban buscando, ya que contaba con una orden de arresto vigente.
Hace un par de meses tenía una cita en un tribunal estatal por un delito menor, pero no se presentó, por lo que el juez emitió una solicitud para su arresto, empeorando su situación actual, ya que le fue negado el privilegio de salir bajo fianza.
No es la primera y seguramente no será la última vez que un hombre es atrapado intentando seducir a menores de edad a través de las redes sociales, de hecho casi todos los días se arresta a un individuo por esta falta inmoral. Los agresores están conscientes de que las niñas que intentan seducir son menores de edad, equivalente a un delito grave en Estados Unidos.
Esto no ha parecido importarles, ya que su emoción o ganas de probar algo prohibido los ha llevado a ser apresados, nunca imaginaron que esas adolescentes eran en realidad agentes del Buró de Investigaciones de Georgia y de la unidad de Delitos Cibernéticos del Departamento de Justicia.
No obstante, no es el primer hispano que se ve en este tipo de situación, en ocasiones incluso llegan a viajar desde ciudades o estados distintos con la intención de intimar con una menor de edad, lo que los lleva a terminar acusados de intentar inducir a una niña a cometer faltas indecentes, explotación infantil y conspirar para cometer un abuso sexual.
La policía anunció que más de 220 agencias de la ley del estado de Georgia están involucradas en las investigaciones para dar con los adultos que fantasean con abusar sexualmente de menores de edad, por lo que esta detención seguramente no será la última.
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