Un estudio realizado en California, Estados Unidos, afirma que los nombres que nos ponen nuestros padres nos pueden ayudar a conseguir empleo, peo también pueden empeorar nuestra situación laboral.
Según el trabajo llamado "Are Emily And Greg More Employable Than Lakisha and Jamal?" ("¿Son Emily y Greg mejores para conseguir un empleo que Lakisha and Jamal?") los expertos indican que los empleadores, al recibir una serie de CVs para buscar empleados, revisan también con cuidado los datos personales como los nombres, los cuales pueden influir en su decisión.
Para llegar a estas conclusiones los investigadores Roland Fryer y Steven Levitt mostraron una serie de CVs a un grupo de empresarios. En ellos mismos había nombres diferentes. Previamente, ellos habían descubierto que las personas afroamericanas tienen comúnmente nombres como Jamal o Lakisha, mientras que los blancos prefieren nombres como Greg, Amy o Emily.
Luego de evaluar a los empresarios se descubrió que ellos contrataron al 50% de las personas cuyos nombres parecían ser "de blancos".
Por otro lado, también se descubrió que las personas que se sienten felices con sus nombres tienden a tener mayor éxito en su vida ya que parecen sentirse más alegres con su vida. (Con información de la BBC)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]