por jimo 10th Febrero 2022, 21:47Está obligada a usar cremas con esteroides para siempre y médicos de Inglaterra le advirtieron de posibles brotes en el futuro. “Esperaba que se hubieran equivocado y que fuera otra cosa”, comentó.
Fiona Hooker, de 32 años, quedó embarazada de su segundo hijo a finales de 2020. Foto: referencial/Pixabay
Fiona Hooker, de Hampshire (Inglaterra), quedó embarazada de su segundo hijo a finales de 2020. Aunque al principio todo transcurría con normalidad, dos meses antes de dar a luz comenzaron a salirle dolorosas ampollas en todo el cuerpo y luego llegó la mala noticia.
“Fui al médico después de unos días porque cada vez me picaban más y eran insoportables”, declaró Hooker a South West News Service, en una entrevista citada por New York Post este jueves 10 de febrero. “No podía soportar el dolor”, agregó.
El último 13 de junio tuvo a su hijo y sus problemas de salud empeoraron. “Exploté con ampollas en la barriga, el pecho, los brazos, las piernas y en cualquier lugar donde sostenía a mi bebé. Fue bastante difícil. Es como si fuese alérgica a él”, reveló.
Como Hooker ya tenía una hija de 3 años con la cual no tuvo ese tipo de dificultades, los médicos estaban consternados. Finalmente le diagnosticaron penfigoide gestacional, un trastorno autoinmune “causado por el sistema inmunitario de una mujer que produce autoanticuerpos y ataca por error a su propia piel”.
Se trata de un trastorno que afecta a una de cada 50.000 mujeres embarazadas, según expertos en salud.
“Cuando me diagnosticaron, me sorprendió porque es muy raro: esperaba que se hubieran equivocado y que fuera otra cosa”, añadió la mujer de 32 años.
Ella aún desconoce la causa. “Creen que podría tener que ver con el bebé. Algo en el ADN del padre hace que la placenta comience a atacar una proteína que también está en la piel, por lo que mi cuerpo estaba atacando mi propia piel”, puntualizó.
“Mi hijo debe tener un gen de su padre que mi hija obtuvo de mí porque no lo tenía en mi primer embarazo”, señaló.
Para sobrellevarlo, le dijeron que deberá usar cremas con esteroides para siempre y que puede sufrir brotes menores a futuro. Por lo tanto, reconoció que no tiene en mente tener más hijos.
No creo que pueda soportar otra vez volver as vivir esta experiencia”, aseguró.
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Fiona Hooker, de 32 años, quedó embarazada de su segundo hijo a finales de 2020. Foto: referencial/Pixabay
Fiona Hooker, de Hampshire (Inglaterra), quedó embarazada de su segundo hijo a finales de 2020. Aunque al principio todo transcurría con normalidad, dos meses antes de dar a luz comenzaron a salirle dolorosas ampollas en todo el cuerpo y luego llegó la mala noticia.
“Fui al médico después de unos días porque cada vez me picaban más y eran insoportables”, declaró Hooker a South West News Service, en una entrevista citada por New York Post este jueves 10 de febrero. “No podía soportar el dolor”, agregó.
El último 13 de junio tuvo a su hijo y sus problemas de salud empeoraron. “Exploté con ampollas en la barriga, el pecho, los brazos, las piernas y en cualquier lugar donde sostenía a mi bebé. Fue bastante difícil. Es como si fuese alérgica a él”, reveló.
Como Hooker ya tenía una hija de 3 años con la cual no tuvo ese tipo de dificultades, los médicos estaban consternados. Finalmente le diagnosticaron penfigoide gestacional, un trastorno autoinmune “causado por el sistema inmunitario de una mujer que produce autoanticuerpos y ataca por error a su propia piel”.
Se trata de un trastorno que afecta a una de cada 50.000 mujeres embarazadas, según expertos en salud.
“Cuando me diagnosticaron, me sorprendió porque es muy raro: esperaba que se hubieran equivocado y que fuera otra cosa”, añadió la mujer de 32 años.
Ella aún desconoce la causa. “Creen que podría tener que ver con el bebé. Algo en el ADN del padre hace que la placenta comience a atacar una proteína que también está en la piel, por lo que mi cuerpo estaba atacando mi propia piel”, puntualizó.
“Mi hijo debe tener un gen de su padre que mi hija obtuvo de mí porque no lo tenía en mi primer embarazo”, señaló.
Para sobrellevarlo, le dijeron que deberá usar cremas con esteroides para siempre y que puede sufrir brotes menores a futuro. Por lo tanto, reconoció que no tiene en mente tener más hijos.
No creo que pueda soportar otra vez volver as vivir esta experiencia”, aseguró.
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