Los asexuales son personas que no sienten atracción sexual hacia ninguna otra persona ni placer durante el sexo.
Existe un pequeño porcentaje, 3% de asexuales, que existe en el mundo. Ellos se ven diferentes ante la sociedad. "Simplemente el sexo no me gusta", dicen. ¿Es esto posible?
Al parecer sí. Cada vez más asexuales "salen del clóset" y hacen valer sus derechos. Por eso muchos foros en la web han tenido un éxito importante: necesitan encontrar a otros como ellos que no los rechacen o no entiendan sus necesidades.
Según la más importante comunidad de asexuales en el mundo, la Asexual Visibility and Education Network (AVEN), que reúne virtualmente a 782 miembros de todo el mundo, explica que la asexualidad es una inapetencia al sexo desde muy temprana infancia y no es una elección. Ellos clasifican diversos grados de asexualidad:
A: Tiene deseo sexual, pero ninguna atracción romántica.
B: Tiene atracción romántica, pero sin apetito sexual.
C: Tiene ambos.
D: Ninguno de los dos.
Si tu respuesta aplica para alguno de estos cuatro sectores entonces probablemente seas un asexual. En el sitio Platonic partners, una página de contactos para encuentros sin sexo, exaltan la asexualidad con orgullo también.
Aunque casi todos los asexuales están escondidos aún, los hay también famosos que han dicho (no sin causar revuelo) su no preferencia del sexo. Es el caso del cantante Morrissey, quien dijo en alguna ocasión que a él, una de las cosas que no le interesaban en el mundo era precisamente el sexo y que no podía imaginar su cuerpo respondiendo a un estímulo sexual.
La revista ADN hace un top ten de los asexuales más famosos entre los que se encuentran, además del ex líder de The Smiths, Paul Bowles, Salvador Dalí, Kafka y Hitler, entre otros.
Los asexuales se defienden cuando son atacados respecto a la idea de una vida sin sexo: "Creo que a veces una pareja de casados o que viven juntos tienen menos sexo del que querrían tener. A veces será por falta de tiempo, por estrés, por aburrimiento, porque caen en la rutina y entonces pasan a tener una vida sin sexo, pero queriendo tenerlo y no haciendo nada para lograrlo. Eso es peor porque te lleva a la frustración y a tener problemas con tu pareja, pero si de inicio te asumes como asexual esos problemas te pasarían de largo. Nosotros nos detenemos a disfrutar de nuestra pareja sin condiciones y lo amamos tal cual es", señala Rosario, una joven asexual.
Para el profesor de psicología de la Universidad de UTAH, Donald Strassberg, y que ha hecho investigaciones en torno a la función y disfunción sexual, "la asexualidad podría ser explicada desde estos dos frentes. El primero, Desorden del Deseo Sexual Hipoactivo (HSDD, Hypoactive Sexual Desire Disorder) y el Desorden de Aversión Sexual. En este caso, sexo y placer existen como contraposiciones polares".
El Kinsey Institute también realizó un estudio sobre este tema y concluyó que: "Los asexuales parecen caracterizarse más por un escaso deseo y excitación sexual que por niveles bajos de comportamiento sexual o niveles altos de represión sexual".
Rosario finaliza: "¿Para qué basar el amor en la sexualidad si al final sabes que eso se transformará o dejará de existir. Si para ti no importa el sexo, entonces lo que existe en la pareja es amor de verdad".
Existe un pequeño porcentaje, 3% de asexuales, que existe en el mundo. Ellos se ven diferentes ante la sociedad. "Simplemente el sexo no me gusta", dicen. ¿Es esto posible?
Al parecer sí. Cada vez más asexuales "salen del clóset" y hacen valer sus derechos. Por eso muchos foros en la web han tenido un éxito importante: necesitan encontrar a otros como ellos que no los rechacen o no entiendan sus necesidades.
Según la más importante comunidad de asexuales en el mundo, la Asexual Visibility and Education Network (AVEN), que reúne virtualmente a 782 miembros de todo el mundo, explica que la asexualidad es una inapetencia al sexo desde muy temprana infancia y no es una elección. Ellos clasifican diversos grados de asexualidad:
A: Tiene deseo sexual, pero ninguna atracción romántica.
B: Tiene atracción romántica, pero sin apetito sexual.
C: Tiene ambos.
D: Ninguno de los dos.
Si tu respuesta aplica para alguno de estos cuatro sectores entonces probablemente seas un asexual. En el sitio Platonic partners, una página de contactos para encuentros sin sexo, exaltan la asexualidad con orgullo también.
Aunque casi todos los asexuales están escondidos aún, los hay también famosos que han dicho (no sin causar revuelo) su no preferencia del sexo. Es el caso del cantante Morrissey, quien dijo en alguna ocasión que a él, una de las cosas que no le interesaban en el mundo era precisamente el sexo y que no podía imaginar su cuerpo respondiendo a un estímulo sexual.
La revista ADN hace un top ten de los asexuales más famosos entre los que se encuentran, además del ex líder de The Smiths, Paul Bowles, Salvador Dalí, Kafka y Hitler, entre otros.
Los asexuales se defienden cuando son atacados respecto a la idea de una vida sin sexo: "Creo que a veces una pareja de casados o que viven juntos tienen menos sexo del que querrían tener. A veces será por falta de tiempo, por estrés, por aburrimiento, porque caen en la rutina y entonces pasan a tener una vida sin sexo, pero queriendo tenerlo y no haciendo nada para lograrlo. Eso es peor porque te lleva a la frustración y a tener problemas con tu pareja, pero si de inicio te asumes como asexual esos problemas te pasarían de largo. Nosotros nos detenemos a disfrutar de nuestra pareja sin condiciones y lo amamos tal cual es", señala Rosario, una joven asexual.
Para el profesor de psicología de la Universidad de UTAH, Donald Strassberg, y que ha hecho investigaciones en torno a la función y disfunción sexual, "la asexualidad podría ser explicada desde estos dos frentes. El primero, Desorden del Deseo Sexual Hipoactivo (HSDD, Hypoactive Sexual Desire Disorder) y el Desorden de Aversión Sexual. En este caso, sexo y placer existen como contraposiciones polares".
El Kinsey Institute también realizó un estudio sobre este tema y concluyó que: "Los asexuales parecen caracterizarse más por un escaso deseo y excitación sexual que por niveles bajos de comportamiento sexual o niveles altos de represión sexual".
Rosario finaliza: "¿Para qué basar el amor en la sexualidad si al final sabes que eso se transformará o dejará de existir. Si para ti no importa el sexo, entonces lo que existe en la pareja es amor de verdad".