Era un hombre tan enano

Era un hombre tan enano, pero tan enano, que cuando se sentó en una moneda de 25 centavos le sobraban 24 centavos.

¿Cuál es el colmo de un enano?
Tirarse de un edificio y quedarse colgado del andén.

Era un señor tan chiquito que le olía a pies

Era un ladrón que estaba robando en una casa pero con tal mala suerte que llegaron los dueños de casa y lo vieron, entonces, el ladrón dice:
Como ya me vieron, los voy a tener que matar, pero antes quiero saber sus nombres, y le pregunta a la muchacha su nombre y ella dice:
Isabel.
A ti no te puedo matar porque así se llama mi mamá.
Luego le pregunta al muchacho y él le dice:
Me llamo Juan, pero mis amigos me dicen Isabel.