Una adolescente descubrió que tenía un tumor cerebral semanas después de que a su madrastra le diagnosticaran la misma afección.
Daisy Cranshaw descubrió su propio tumor cerebral poco después de que a su madrastra Tina le dieran meses de vida. Foto: North News
Tina Cranshaw, una mujer inglesa de 51 años, estaba en una llamada, a través de la plataforma de Zoom en el trabajo en septiembre de 2020, cuando tuvo inconvenientes en su rostro y comenzó a arrastrar las palabras mientras intentaba decirles a sus colegas que tenía “el peor” dolor de cabeza y que podía oler a gas.
Sus compañeros de trabajo se preocuparon y llamaron a una ambulancia que llevó a Tina a Doncaster Royal Infirmity, donde una tomografía computarizada reveló una sombra sobre su cerebro.
La madre de tres hijos fue trasladada al Hospital Royal Hallamshire, en Sheffield, una ciudad inglesa, para una resonancia magnética y los médicos confirmaron que tenía un tumor cerebral “del tamaño de una pelota de golf”.
La familia todavía mantuvo esperanza cuando fue operada, el 2 de octubre, para tratar de extirpar el tumor, pero la operación no tuvo éxito y le dieron entre seis y 12 meses de vida.
En un momento, el padre de Daisy pensó que podría perder a su esposa y a su hija al mismo tiempo. Foto: North News
La hijastra de Tina, Daisy, contó al diario North News lo siguiente: “Fue horrible, fue un momento realmente estresante. Estaba tan preocupada que no dejaba de pensar, esta puede ser la última vez que vea a mi madrastra”.
Sorprendentemente, las cosas empeoraron para la familia cuando descubrieron que Daisy también tenía un tumor en diciembre de ese mismo año.
La estudiante universitaria se había estado quejando de dolores de cabeza desde febrero, pero su médico le manifestó que no debía preocuparse. El dolor de cabeza de Daisy era tan intenso que fue a urgencias, donde le dijeron que tenía migrañas.
Fue solo cuando le dijo a su médico que había desarrollado un punto ciego en su lado izquierdo en septiembre que la enviaron a una resonancia magnética de emergencia, el cual mostró que también tenía un tumor.
Daisy narró que fue lo peor que pudo haber escuchado, especialmente después de ver por lo que ha pasado su madrastra.
“Papá está perdiendo gradualmente a su esposa, y pensé que también podría estar perdiéndome a mí. Fue horrible”.
Afortunadamente, el tumor de Daisy está “muerto”, lo que significa que no pone en peligro su vida.
Ahora, Daisy participa en el desafío 10.000 Steps a Day de Brain Tumor Research para recaudar dinero para la organización benéfica y apoyar a Tina.
Afortunadamente, el tumor cerebral de Daisy estaba "muerto" y, por lo tanto, no ponía en peligro su vida. Foto: North News
“Hay una gran falta de investigación sobre esta enfermedad devastadora y se necesita hacer más. Mi maravillosa madrastra es mi inspiración para hacer esto, ya que siempre me hace perseverar en todo lo que hago”, destacó Daisy.
Brain Tumor Research está tratando de alentar a más personas a participar en su desafío anual, el cual recaudó cerca de 1 millón de euros el año pasado.
“Estamos muy agradecidos con Daisy por aceptar este desafío por nosotros, ya que solo con el apoyo de personas como ella podemos avanzar en nuestra investigación sobre los tumores cerebrales y mejorar el resultado para los pacientes. La mejor parte del Desafío de 10.000 pasos al día en febrero es que puedes adaptar tus pasos a tu vida cotidiana”, aseveró Matthew Price, quien pertenece a la organización benéfica.
“Eso podría ser tomar un café y ponerse al día con amigos en su parque local, caminar para ir al trabajo o ir a la escuela en lugar de conducir, bajarse del autobús unas paradas antes o caminar por su casa mientras habla por teléfono. ¡Incluso podrían formar equipo con amigos o colegas y completar sus pasos juntos!”, finalizó.
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Daisy Cranshaw descubrió su propio tumor cerebral poco después de que a su madrastra Tina le dieran meses de vida. Foto: North News
Tina Cranshaw, una mujer inglesa de 51 años, estaba en una llamada, a través de la plataforma de Zoom en el trabajo en septiembre de 2020, cuando tuvo inconvenientes en su rostro y comenzó a arrastrar las palabras mientras intentaba decirles a sus colegas que tenía “el peor” dolor de cabeza y que podía oler a gas.
Sus compañeros de trabajo se preocuparon y llamaron a una ambulancia que llevó a Tina a Doncaster Royal Infirmity, donde una tomografía computarizada reveló una sombra sobre su cerebro.
La madre de tres hijos fue trasladada al Hospital Royal Hallamshire, en Sheffield, una ciudad inglesa, para una resonancia magnética y los médicos confirmaron que tenía un tumor cerebral “del tamaño de una pelota de golf”.
La familia todavía mantuvo esperanza cuando fue operada, el 2 de octubre, para tratar de extirpar el tumor, pero la operación no tuvo éxito y le dieron entre seis y 12 meses de vida.
En un momento, el padre de Daisy pensó que podría perder a su esposa y a su hija al mismo tiempo. Foto: North News
La hijastra de Tina, Daisy, contó al diario North News lo siguiente: “Fue horrible, fue un momento realmente estresante. Estaba tan preocupada que no dejaba de pensar, esta puede ser la última vez que vea a mi madrastra”.
Sorprendentemente, las cosas empeoraron para la familia cuando descubrieron que Daisy también tenía un tumor en diciembre de ese mismo año.
La estudiante universitaria se había estado quejando de dolores de cabeza desde febrero, pero su médico le manifestó que no debía preocuparse. El dolor de cabeza de Daisy era tan intenso que fue a urgencias, donde le dijeron que tenía migrañas.
Fue solo cuando le dijo a su médico que había desarrollado un punto ciego en su lado izquierdo en septiembre que la enviaron a una resonancia magnética de emergencia, el cual mostró que también tenía un tumor.
Daisy narró que fue lo peor que pudo haber escuchado, especialmente después de ver por lo que ha pasado su madrastra.
“Papá está perdiendo gradualmente a su esposa, y pensé que también podría estar perdiéndome a mí. Fue horrible”.
Afortunadamente, el tumor de Daisy está “muerto”, lo que significa que no pone en peligro su vida.
Ahora, Daisy participa en el desafío 10.000 Steps a Day de Brain Tumor Research para recaudar dinero para la organización benéfica y apoyar a Tina.
Afortunadamente, el tumor cerebral de Daisy estaba "muerto" y, por lo tanto, no ponía en peligro su vida. Foto: North News
“Hay una gran falta de investigación sobre esta enfermedad devastadora y se necesita hacer más. Mi maravillosa madrastra es mi inspiración para hacer esto, ya que siempre me hace perseverar en todo lo que hago”, destacó Daisy.
Brain Tumor Research está tratando de alentar a más personas a participar en su desafío anual, el cual recaudó cerca de 1 millón de euros el año pasado.
“Estamos muy agradecidos con Daisy por aceptar este desafío por nosotros, ya que solo con el apoyo de personas como ella podemos avanzar en nuestra investigación sobre los tumores cerebrales y mejorar el resultado para los pacientes. La mejor parte del Desafío de 10.000 pasos al día en febrero es que puedes adaptar tus pasos a tu vida cotidiana”, aseveró Matthew Price, quien pertenece a la organización benéfica.
“Eso podría ser tomar un café y ponerse al día con amigos en su parque local, caminar para ir al trabajo o ir a la escuela en lugar de conducir, bajarse del autobús unas paradas antes o caminar por su casa mientras habla por teléfono. ¡Incluso podrían formar equipo con amigos o colegas y completar sus pasos juntos!”, finalizó.
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