Bailey Boswell iba a convertirse en la primera mujer en la historia del estado de Nebraska en ser sentenciada a la pena capital. Ahora pasará el resto de su vida tras las rejas.
Bailey Boswell, la reclusa que mató y desmembró a la vendedora de una ferretería de Nebraska, Estados Unidos, fue sentenciada a cadena perpetua este lunes 8 de noviembre, y evitó ser la primera mujer en la historia del estado en ser sentenciada a muerte.
Dos jueces argumentaron que la joven de 27 años merecía morir por sus crímenes y el tercero sostuvo que los fiscales no pudieron demostrar que el caso mereciera el castigo máximo, según la agencia AP.
Bailey Boswell ahora pasará el resto de su vida en el Centro Correccional para Mujeres de Nebraska por el crimen contra Sydney Loofe, ocurrido en 2017. Ambas se conocieron mediante en la aplicación de citas Tinder.
Loofe, cajera de una tienda Menards en Lincoln, fue estrangulada. Más tarde, las partes de su cuerpo fueron encontradas en bolsas de basura a lo largo de caminos rurales en el condado rural de Clay.
“Puedo decir que Bailey está agradecida por el bien de su familia y particularmente por su hija (de 7 años), Nahla, que no recibió una sentencia de muerte, y yo también”, dijo Todd Lancaster, abogado de la reclusa.
Bailey Boswell fue condenada en octubre de 2020 por asesinato en primer grado, conspiración para cometer asesinato y disposición indebida de restos humanos. Aubrey Trail, el hombre con el que cometió el crimen, recibió la pena de muerte.
Según AP, la ejecución más reciente en el estado fue del asesino convicto Carey Dean Moore, en 2018, después de que retirara todas sus apelaciones y pidiera ser asesinado. Antes de eso, la última ejecución de Nebraska fue en 1997.
Boswell es la decimosexta mujer que cumple cadena perpetua en Nebraska por asesinato en primer grado, de acuerdo con una portavoz del Departamento de Servicios Correccionales de Nebraska. Los hombres condenados a muerte están a la espera de ser ejecutados en la institución correccional estatal de Tecumseh, exclusivamente para hombres.
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Bailey Boswell, la reclusa que mató y desmembró a la vendedora de una ferretería de Nebraska, Estados Unidos, fue sentenciada a cadena perpetua este lunes 8 de noviembre, y evitó ser la primera mujer en la historia del estado en ser sentenciada a muerte.
Dos jueces argumentaron que la joven de 27 años merecía morir por sus crímenes y el tercero sostuvo que los fiscales no pudieron demostrar que el caso mereciera el castigo máximo, según la agencia AP.
Bailey Boswell ahora pasará el resto de su vida en el Centro Correccional para Mujeres de Nebraska por el crimen contra Sydney Loofe, ocurrido en 2017. Ambas se conocieron mediante en la aplicación de citas Tinder.
Loofe, cajera de una tienda Menards en Lincoln, fue estrangulada. Más tarde, las partes de su cuerpo fueron encontradas en bolsas de basura a lo largo de caminos rurales en el condado rural de Clay.
“Puedo decir que Bailey está agradecida por el bien de su familia y particularmente por su hija (de 7 años), Nahla, que no recibió una sentencia de muerte, y yo también”, dijo Todd Lancaster, abogado de la reclusa.
Bailey Boswell fue condenada en octubre de 2020 por asesinato en primer grado, conspiración para cometer asesinato y disposición indebida de restos humanos. Aubrey Trail, el hombre con el que cometió el crimen, recibió la pena de muerte.
Según AP, la ejecución más reciente en el estado fue del asesino convicto Carey Dean Moore, en 2018, después de que retirara todas sus apelaciones y pidiera ser asesinado. Antes de eso, la última ejecución de Nebraska fue en 1997.
Boswell es la decimosexta mujer que cumple cadena perpetua en Nebraska por asesinato en primer grado, de acuerdo con una portavoz del Departamento de Servicios Correccionales de Nebraska. Los hombres condenados a muerte están a la espera de ser ejecutados en la institución correccional estatal de Tecumseh, exclusivamente para hombres.
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