por jimo 2nd Noviembre 2021, 12:15
LOS LLANOS DE ARIDANE, Islas Canarias- Un volcán en la isla española de La Palma que ha estado en erupción durante seis semanas arrojó mayores cantidades de ceniza desde su boca principal el domingo, un día después de producir su terremoto más fuerte hasta la fecha.
Los flujos de lava que descienden hacia el Océano Atlántico desde una cresta volcánica han cubierto 970 hectáreas de terreno desde que comenzó la erupción el 19 de septiembre, según mostraron los datos del servicio de vigilancia por satélite de la Unión Europea. Al descender por la ladera, la roca fundida ha destruido más de 2,000 edificios y ha obligado a evacuar a más de 7,000 personas.
Pero las autoridades de las Islas Canarias, de las que forma parte La Palma, no han informado de ningún herido por contacto con la lava o por inhalación de los gases tóxicos que suelen acompañar a la actividad volcánica.
Los expertos afirman que es difícil predecir cuándo terminará la erupción porque la lava, la ceniza y los gases que salen a la superficie son un reflejo de la compleja actividad geológica que se desarrolla en las profundidades de la tierra y que está lejos del alcance de la tecnología disponible actualmente.
Sin señales del fin de la erupción de volcán en la isla de La Palma
Las Islas Canarias, en particular, "están estrechamente conectadas con anomalías térmicas que llegan hasta el núcleo de la tierra", dijo el geoquímico de la Universidad de Cornell Esteban Gazel, que ha estado recogiendo muestras del volcán Cumbre Vieja.
"Es como un paciente. Se puede controlar cómo evoluciona, pero decir exactamente cuándo morirá es extremadamente difícil", dijo Gazel. "Es un proceso que está conectado con muchas otras dimensiones del interior del planeta".
Los indicios monitorizados por los científicos -deformación del suelo, emisiones de dióxido de azufre y actividad sísmica- se mantuvieron firmes en Cumbre Vieja. El Instituto Geográfico Español, o IGN, dijo que un temblor de magnitud 5 en las primeras horas del sábado no solo se sintió en La Palma, sino también en La Gomera, una isla vecina en el extremo occidental del archipiélago canario.
Según el IGN, la columna de ceniza que se elevó sobre el volcán alcanzó el domingo una altura de 4.5 kilómetros antes de que un viento más fuerte la dispersara. Muchos pueblos cercanos y una base de telescopios situada más al norte en una montaña a 7,800 pies sobre el nivel del mar quedaron cubiertos por una gruesa capa de ceniza.
La erupción también ha convertido a la isla en una atracción turística, especialmente cuando muchos españoles se preparaban para celebrar el Día de Todos los Santos, una festividad católica que honra a los muertos, el lunes.
Las autoridades locales dijeron que se esperaban unos 10,000 visitantes durante el fin de semana largo y que el 90% de los alojamientos de La Palma estaban totalmente reservados. Se estableció un servicio de autobuses para los turistas que quisieran echar un vistazo al volcán con el fin de mantener los coches privados fuera de las carreteras principales para que los servicios de emergencia pudieran trabajar sin ser molestados.
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