Una corte británica emitió una orden judicial para restringir a Cartwright de practicar sexo ruidoso por cuatro años. La sentencia se dictó en el 2010 después de quejas contantes de los vecinos.
Ahora Cartwright, quien pasó 8 y 12 semanas en libertad condicional por violar la orden, volvió a presentarse a la corte para "gritar" su derecho a un sexo libre con su esposo de 38 años.
"No entiendo por qué la gente me pide que guarde silencio cuando para mí es una situación normal", dijo ante la mujer ante la autoridad.
Fuente: SDP noticias
AJV
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]